Siendo uno de los tés más consumidos durante generaciones en el sudeste asiático, el té de jazmín debe su sabor a la mezcla de la fragancia de estas hojas con té verde.
Se sugiere utilizar una cucharada sopera, bien cargada, por cada taza de agua. El agua no debe hervir, sino calentarse hasta que salgan las primeras burbujas, ya que las altas temperaturas derivan en un amargor no muy agradable al paladar. Dejar reposar por 2 minutos y servir.
Luis C. –
Carolina Mayer –
Ginna V. –
Miranda lo G. –
Me encanta
Carlos R. –
Luis C. –